La pandemia provocada por el coronavirus covid-19, que comenzó a principios del año 2020, volverá a ser la culpable, por segundo año consecutivo, de que no se puedan celebrar las Jornadas Fadriqueñas que se han realizado durante doce años seguidos entre el 2008 y el 2019, para honrar la memoria del fundador de La Villa de don Fadrique, el Infante Don Fadrique de Castilla, que murió asesinado un 29 de mayo de 1358 a manos de su hermanastro, el rey Pedro I El Cruel, en los reales alcázares de Sevilla.
Así que las calles centrales que unen a la Plaza Mayor con la Plaza de España tendrán que esperar al año que viene, al 2022, para ver si se puede volver a esta, que ya era una gran fiesta de primavera para todos los fadriqueños, un evento turístico y cultural de primera magnitud, que combina el teatro con la música, las exposiciones con las exhibiciones gastronómicas, y de las mejores tradiciones de lo que ha sido y es La Villa de don Fadrique a lo largo de todos estos siglos.
Todo ello se aliñaba con un Mercado Medieval y las vestimentas al estilo medieval, más los pendones con los escudos heráldicos que colgaban de las ventanas y balcones de la población fadriqueña, un ambiente que devolvía a este municipio de La Mancha santiaguista, a sus orígenes, a ese año de 1343 en el que un 25 de abril, el Infante Don Fadrique, hijo del rey Alfonso XI de Castilla y de Leonor de Guzmán, otorgaba la Carta Puebla con el Fuero de Sepúlveda, a La Puebla de la Isla, que, desde entonces, y hasta el año 1916, pasó a denominarse La Puebla de Don Fadrique, con todos los privilegios que ese documento daba "a los que habitaren estas tierras", sin pagar diezmos y portazgos a Corral de Almaguer, y con la posesión de tres aranzadas de viña a "quien en estas tierras se asentare".
Todo esto y mucho más de lo que han dado de sí los 12 años que se han celebrado, y mientras vuelve la normalidad, también a este tipo de eventos, se pueden disfrutar aquí